Cómo recuperar el pelo: plan infalible de 28 días

Semana 1: Sienta las bases (y revisa las herramientas)

¿Tu secador va muy lento y se recalienta? ¿Hace años que tienes los mismos cepillos? ¿Tu plancha no se desliza como debería? Es hora de invertir en nuevas herramientas y accesorios. Además de mejorar el look final, cuidan la estructura de tu cabello, así que vale la pena apostar por lo último, tanto en materiales como en tecnología.

• Un nuevo secador. Los secadores iónicos secan 6 veces más rápido que uno convencional y evitan el daño provocado por el calor extremo.
• Los cepillos de aire. Aceleran el moldeado, porque ayudan a dar forma, a la vez que secan. Y gracias a su revestimiento, reducen el encrespamiento y aportan brillo.
• Cepillos eco. Confeccionados a base de fibra de trigo son 100% biodegradables, pero con púas y bases resistentes al calor.

¿Usas el champú correcto?

Un champú adaptado a tu pelo es fundamental para mantener el cabello suelto, sedoso y sano.

• ¿Lavas tu pelo a diario? Elige una fórmula ultra suave con ingredientes naturales. Fíjate en que en el envase ponga “uso frecuente”.  
• Pelo con exceso de grasa. Exfolia el cuero cabelludo cada 3 semanas y lávalo con champús que incluyan activos reguladores del sebo. También puedes combinar tu champú antigrasa con un champú en seco.
• Frena la caída. Estimula el crecimiento capilar con champús que contengan activos como la biotina, entre otros.
• Adiós caspa. ¡Puede aparecer en cualquier momento! Busca el zinc pyrithione entre sus activos: previene y elimina la caspa.
• ¿Vives en una ciudad? Prueba los champús antipolución sin sulfatos. Eliminan los residuos contaminantes que se adhieren al pelo y le devuelven el brillo perdido, sin dañar la estructura del cabello.

Semana 2: Céntrate en tus objetivos

¿Qué quieres conseguir?

• Más volumen. Apuesta por líneas que aportan densidad (champú, acondicionador y mascarilla) o por fórmulas 2 en 1, como los champú-acondicionador.
• Potencia el brillo. Aclara con agua abundante para eliminar posibles restos que dejarían el pelo opaco. Además, cepíllalo a diario y aplícate mascarillas nutritivas.
• Fortalece el pelo. Lo último para que no se rompa es reforzarlo con activos naturales como el bambú. Este consigue reducir la rotura hasta un 90%.
• Repara a fondo. ¿Muy dañado? Hazte un tratamiento SOS en la pelu y refuérzalo en casa con sérums y mascarillas con proteínas.
• Frena la sequedad. Un pelo deshidratado es más propenso a la rotura. Alíate con el aloe vera y la manteca de karité y huye del agua muy caliente y de productos con alcohol: lo resecan más.
• Cabello y deporte. Si después de hacer ejercicio el pelo te queda chafado, “usa un champú en seco, absorbe el sudor y la grasa”, recomienda la peluquera Olga G. San Bartolomé.
• Mima el color. Usa una gama capilar específica para cabellos teñidos, protector capilar de los rayos UVA-UVB, y mantenlo bien hidratado.
• Sin matices naranja. Para que los cabellos teñidos no se oxiden y adquieran tonos verdes o anaranjados, puedes recurrir a champús y acondicionadores correctores del color, de venta en peluquerías.

Semana 3: cuida el acabado

No nos podemos olvidar de la fase final en nuestro programa capilar. Para que las puntas no se abran y el peinado se vea perfecto más tiempo son indispensables los productos de sellado.

Olga G. San Bartolomé nos recomienda sellar las puntas con cremas de acabado o en formato spray. Con este gesto se consigue reparar las zonas más dañadas, así como protegerlas del medio ambiente y las fuentes de calor. 

Si todavía no has incluido un protector térmico en tu rutina de belleza capilar, deberías. Sobre todo si usas el secador o la plancha día sí y día también. Es un producto que actúa como escudo frente a las fuentes de calor que, mal utilizadas o si se abusa de ellas, acaban dañando las fibras capilares. Además de proteger del calor, ayuda a texturizar el pelo, mantener el color –en caso de cabellos teñidos– y evitar que se deshidrate y reseque.

Sin siliconas, tu pelo vive mejor

Muchas mascarillas, acondicionadores y productos de acabado que has usado o usas llevan siliconas. Dan brillo temporalmente, sí, pero como nos recuerda nuestra experta "aportan mucho peso y ensucian el cabello, todo lo contrario de lo que buscamos". Si quieres un sustituto natural, en el mercado han aparecido las denominadas siliconas naturales, obtenidas de ingredientes como la manteca de tucuma. Busca esta y otras mantecas vegetales (karité, muru muru, mango) en tus productos capilares y comprobarás cómo tu cabello, agradecido, te mostrará siempre su mejor cara. 

Semana 4: Revisa tu despensa

• Una dieta deficiente afecta al cabello. Procura que tu menú sea equilibrado y en tus platos no falten los nutrientes básicos. Por ejemplo, en el caso de una anemia leve es muy posible que aparezcan problemas de descamación o de pérdida de cabello.
• Aumenta el consumo de... Legumbres, ya que fortalecen el pelo al contener proteínas, hierro, zinc y biotina. Por otro lado, las frutas y verduras ricas en vitaminas A, B, C y E ayudan también a proteger el cuero cabelludo y favorecen el crecimiento del pelo.
• Complementa con nutricosmética. "Incluyen minerales y vitaminas que fortalecen el cabello, como el zinc, la biotina, la metionina y la cistina", comenta la farmacéutica Esther Sansi, quien asegura que los efectos empezarían a notarse al cabo de 3 semanas.