Gtres
Su funcionamiento es bien simple. Las planchas tienen dos placas que desprenden calor y estas son las que alisan nuestro cabello. Por eso es importante prestar atención en ellas. Así, a la hora de hacernos con unas, tenemos que tener claro que no todas las planchas son iguales, y es preferible invertir un poco más en ellas para seguir teniendo un pelazo.
El material con el que esté hecho las placas es fundamental. Hay muchas opciones. No obstante, el rey de la pista sigue siendo la cerámica. Casi todas las marcas de media y alta gama confían en él, ya que es capaz de actuar a baja temperatura, regulando su fricción para que el pelo no se encrespe y duran mucho (por eso su precio merece la pena).
¿Seco o mojado?
¡Seco! Mojado ni se te ocurra. Casi todas las planchas están diseñadas para trabajar con el pelo completamente seco. Cuando el cabello está húmedo y utilizas las planchas, corres el riesgo de freírte el pelo. Por no hablar de que resulta mucho más difícil elaborar un peinado que vaya más allá del liso asiático.
El tamaño importa
Posiblemente hayas visto que existen varios tamaños de planchas de diferentes marcas. Por lo que, sí, el tamaño importa. Para saber cuál va más contigo, piensa para qué vas a utilizarlas y cómo tienes el cabello.
- Pequeñas. Son ideales para llevarlas de viaje (o en el bolso). No obstante, son un complemento que, aunque puede salvarte en más de una ocasión, no son útiles como modelo único.
- Placas finas. Son ideales para hacer ondas y otros peinados, ya que la finura de sus placas permite movimientos más marcados. También son recomendables para cabellos cortos, que están muy de moda, todo sea dicho de paso.
- Estándar. Son las que miden de 2cm a 3cm. Son versátiles, recomendadas para todo tipo de cabellos y útiles en todo tipo de peinados.
- Gruesas. Si alguna vez has visto planchas con las placas muy anchas, debes saber que son ideales para aquellas mujeres que tengan el cabello grueso y mucha cantidad. Acabarás muuucho antes.
Subiendo la temperatura
Ojo, porque si el tamaño importa, la temperatura también. No obstante, aunque las planchas vayan aproximadamente de los 80º a los 235º, es esencial valorar el tipo y estado de tu cabello. Es decir, si tu pelo es fino, baja la temperatura todo lo que puedas. Si no, por mucho protector que te pongas, te quemarás el pelo. La temperatura media es de 180º a 190º. Siempre y cuando no salgas de ahí, todo irá bien. Prometido.
RAZONES POR LAS QUE USAR LAS PLANCHAS
Si tú también quieres lucir melenón fuera de la peluquería, hazte con unas (buenas) planchas. Serán tu mayor aliado. Y si todavía estás dudando, estas 5 razones te harán cambiar de opinión. ¡Toma nota!