Hay una regla no escrita en la Casa Real Británica que dicta que las mujeres de la familia solo pueden usar pintauñas nude. Parece una chorrada pero durante años hemos visto cómo las 'royals' seguían la máxima impuesta por Isabel II, fan incondicional del tono Ballet Slippers de Essie. Y desde que se casó con Harry, Meghan Markle había hecho caso a la reina, pero ayer, en la entrega de los British Fashion Awards se la saltó totalmente esta norma.