Seguro que has escuchado hasta la saciedad eso de "píntate los labios de rojo y verás cómo te cambia la cara". Y es cierto. Está científicamente demostrado: los pintalabios rojos mejoran cualquier cara en cuestión de segundos.
La teoría del color
Las personas tenemos partículas de tres colores en la capa interna de la piel. Las personas que tienen la piel cálida tienen un mayor porcentaje de partículas de color amarillo. Las que la tienen fría, un mayor porcentaje de partículas azules. Pero TODOS nosotros, sin excepción, tenemos la misma cantidad de partículas rojas.
Según la teoría del color, esa es la razón por la que las personas con la piel cálida tienden a buscar más colores con subtonos amarillos y, por supuesto cálidos. Mientras que a las pieles frías, tanto en términos de maquillaje como de ropa, les favorecen tonos fríos y con subtonos azulados. El rojo es como si fuese el color neutro en este caso, pues sienta igual de bien a ambos tipos de personas.
Por lo tanto, no es de extrañar que una buena barra de labios roja haga que recuperemos la luz en la piel al instante. Un poco de corrector en las ojeras, máscara de pestañas, colorete y labios rojos. No necesitas nada más.
No te vale cualquier tonalidad
¡Pero cuidado con escoger el subtono incorrecto del rojo de labios! Si encontramos un rojo neutro, no tendremos que preocuparnos. Sin embargo, tenemos que saber que si nuestra piel es cálida, nuestro rojo tendrá que serlo también y tirar más hacia el naranja. Las pieles frías tendrán que buscar rojos más fríos, que tiran más hacia el azul o el violeta. De esta forma, no habrá confusión y el prometido "resultado buena cara" estará garantizado.
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