Invertir mucho en maquillaje no siempre es necesario. Hay coloretes muy baratos que pueden hacer lo mismo por tus mejillas que otros mucho más caros. Nuestra selección le subirá el ánimo a tu rostro en un periquete y sin que tengas que perjudicar tu bolsillo. Hay soluciones para todos los gustos y tonos de piel.
Coloretes buenos, bonitos y baratos
- Los clásicos. Los coloretes clásicos son los de textura aterciopelada, en formato polvera. Suelen incluir una brochita pero nosotras te recomendamos que utilices una brocha adecuada para extenderlo bien. Nos gustan los de Yves Rocher porque contienen aceite de rosa mosqueta y además de no resecar la piel dejan un aroma increíble. También los de Benefit, porque vienen en formato viaje así que son geniales para llevarlos en el bolso o si no te maquillas a diario.
- Nuevas texturas. Nos encanta experimentar con los coloretes en stick como el de la marca Gosh o los líquidos, como el de Bourjois. Se extienden de maravilla y se funden con tu piel al instante.
- Multiusos. Los coloretes que sirven también para los labios resultan súper prácticos. Puedes llevarlos en el bolso para un retoque rápido o para ahorrar en maquillaje comprando dos productos en uno. Nos gusta el Lip & Chick de The Body Shop. También son interesantes los coloretes con iluminador como el de Astor, porque te ayudan a esculpir tus mejillas con dos toques de brocha.
- Con partículas brillantes. Lo mejor del colorete es el efecto buena cara que produce. Para ello, nada mejor que utilizar uno que incluya partículas iridiscentes que atraigan y dispersen la luz.
- Los colores. Dependiendo de cómo sea el tono de tu piel puedes optar por diferentes tonalidades o matices. Los terracota son ideales para una tez oscura, los coral para pieles medias y los rosas para las más claritas.
Por Sonia Murillo