Uno de los pasos del maquillaje que más respeto nos da es el momento de aplicar el eyeliner. La falta de pulso, el miedo a dejar los ojos asimétricos, o acabar pareciendo Cleopatra a fuerza de ir ensanchando la línea para igualarlos nos corta un poco a la hora de aplicarlo. Pero ahora que llevamos mascarilla y que nuestros ojos se han convertido en los absolutos protagonistas de nuestro rostro se acabaron las excusas para no intentarlo.
Quítate la idea de que es solo cosa de gente joven. Es verdad que con la edad la piel de los párpados pierde firmeza y las arruguitas pueden dificultar su aplicación, pero un ojo bien delineado ganará fuerza y ayudará a levantar la mirada y rejuvenecerla. A continuación tienes algunos consejos para salir airosa de esta prueba.
Antes de empezar...
- Practica. Roma no se construyó en un día...ni tu lograrás el eyeliner perfecto la primera vez que lo intentes. Lo mejor es dedicar una tarde que no tengas ningún compromiso a practicar tranquilamente. Si lo dejas para un día que tengas que salir con un maquillaje impecable puedes acaba arruinando el resultado.
- Prepara el ojo. El resultado de que tu eyeliner se vea impecable y favorecedor también depende de lo que lo rodea. Una ojera marcada o un párpado con manchas o venitas estropearán el efecto.Utiliza un corrector de ojeras y una prebase de párpados que unifique el tono para tener un lienzo perfecto sobre el que trabajar.
- Herramientas adecuadas. Si buscas precisión necesitas hacerte con el material necesario. Un pincel pequeño biselado para crear puntas definidas, bastoncitos de algodón para corregir algún fallo o un rollo de cinta washi tape para utilizar de plantilla son parte esencial del éxito.
¡Empezamos!
- Adapta el eyeliner a tu ojo. Mas importante que tu edad s la forma de tu ojo y párpado. Puedes tener 20 años y un párpado encapotado que dificulta el uso de eyeliner, y tener 50 año y un párpado despejado donde trabajar mejor.
- Para párpado encapotado utiliza productos que no transfieran y sella tu párpado con polvos para evitar antiésteticas dobles lineas.
- Si tienes el ojo caído nunca llegues hasta el final del mismo con el delineado, acábalo antes de que el borde descienda y saca el rabillo hacia arriba a partir de ahí.
- Si por el contrario tu ojo es redondo no hagas un eyeliner ascendente, si no horizontal.
- No olvides la linea de agua superior. Maquillar la linea de agua de las pestañas superiores, el conocido thightlining, es primordial para que tu eyeliner se vea realmente potente y tu mirada más grande. De la misma manera que maquillar la linea de agua inferior en un tono oscuro empequeñece el ojo, conseguir que la superior se vea negra hará que tu eyeliner y máscara de pestañas se vean mucho más intensos y tu mirada más abierta. ¡haz la prueba!
- ¡No estires del ojo! Si para tener la piel más tersa y trabajar mejor estiras del borde exterior del ojo al hacer el delineado, puedes llevarte la desagradable sorpresa de que cuando sueltes el párpado tu eyeliner esté mirando para Cuenca. Marca primero con un lápiz bien afilado la forma que quieres darle a tu eyeliner desde donde empieza a donde acaba y entonces si que puedes estirar para acabar de rellenar y perfeccionar la forma.
- La técnica del lápiz. Si eres principiante es la más sencilla. Consiste en aplicar un lápiz cremoso a ras de pestañas y con ayuda de un pincel finito y biselado difuminar el borde exterior de la linea hacia fuera y en sentido ascendente sacando un rabillo afilado sin aplicar más producto. Si lo necesitas puedes mejorar los bordes con ayuda de un palito de algodón. Si no quieres que con el paso de las horas el lápiz se transfiera, séllalo, sobre todo si tienes párpado graso. Coge un pincel fino y aplica a toques una sombra de ojos del mismo color sobre el lápiz, te ayudará a que te dure mucho más tiempo.
- Eyeliner en gel o rotulador. Para este tipo de productos crea una línea fina a ras de pestañas desde donde quieres que empiece hasta qua acabe. Después traza una línea con la inclinación y longitud que quieres darle al rabillo. Para que te quede la misma inclinación en los dos ojos puedes marcar primero con un lápiz un punto donde quieres que finalice. Una vez que tengas trazadas estas dos líneas, haz otra que vaya desde el rabillo hasta la de ras de pestañas a la altura del centro del ojo. Lo único que te quedará ahora es rellenar el espacio que queda entre ellas.
- Técnica del washi tape. Esta cinta adhesiva de papel es de gran ayuda para crear una reserva que te permita trabajar sin tener que preocuparte. Consiste en aplicar un trozo de la cinta justo en el rabillo exterior del ojo en sentido ascendente con la inclinación que quieras darle a tu eyeliner. Luego traza una linea a ras de pestañas hacia el exterior sin preocuparte en salirte o pasarte, ya que cuando retires la cinta el final habrá quedado muy definido. Para que esta técnica funcione tienes que asegurarte de pegar muy bien la cinta para que no queden huecos entre esta y su piel por los que el pigmento pueda pasar.
- Atrévete con el color. Habrás podido ver que la última moda es aplicar eyeliners de colores llamativos; azules, verdes, violetas,,,incluso rojos o amarillos. Si eres principiante, empieza por colores oscuros que son los más fáciles de llevar. Si quieres probar tonos más claros aplica siempre una linea muy fina a ras de pestañas negra para separar visualmente este color del blanco del ojo. Un tono rojo o rosa a ras de pestañas te puede dar un aspecto enfermizo.
Experimentar con nuestro maquillaje y salir de nuestra zona de confort es una manera divertida de explorar nuevos registros. Si te animas a probar con el eye-liner toma nota de algunos de nuestros favoritos para conseguir buenos resultados...