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Usar mascarillas no es negociable. Tenemos que protegernos y proteger a los demás del Covid-19 así que no podemos ni debemos prescindir de ellas. Sin embargo, su uso constante está dándole muchos quebraderos de cabeza a más de una: irritación, rojeces, granitos... (Aquí alguien que lo ha sufrido todo al mismo tiempo). Son problemas que presentan cierta incompatibilidad a la hora de ser tratados así que una de las mejores formas de hacerles frente es practicando el multimasking. Es decir, combinar el uso de varias mascarillas cosméticas. Primero puedes aplicar una que realice una limpieza profunda y luego otra que calme o hidrate bien la piel.
Afortunadamente yo ya he dado con el combo que mejor le funciona a mi piel, pero hay muchas más opciones dependiendo de cómo sea la tuya. Aquí te cuento qué es lo que me ha dado mejor resultado a mí y otras soluciones que pueden ser igual de efectivas. Y además, te doy un truco para prevenir que vuelvas a experimentar todos estos problemas o, por lo menos, para que los minimices todo lo posible.