Por Jernej Graj vía Unsplash
Por muy perezosa que seas, hay tres pasos que nunca (jamás en la vida) pueden faltar en tu rutina diaria de belleza: la limpieza, la hidratación facial y la protección solar. Recuerda que la piel tiene memoria. Si no la cuidas hoy, lo lamentarás mañana. Es fundamental que dediques un par de minutos por la mañana y otros dos por la noche a retirar toda la suciedad de tu cutis, así como a aplicar una crema hidratante que se adapte a las necesidades de tu piel.
Tu piel no siempre necesita lo mismo
La clave está en escuchar a tu piel. Por muy buena que sea tu crema hidratante, y por muy bien que te haya ido en otra época de tu vida, es posible que no sea la que más te conviene en estos momentos. Debes aprender a detectar tus necesidades. ¿Tu cutis está apagado? ¿Sufre deshidratación? ¿Tiene exceso de grasa y de impurezas? ¿Los poros están muy abiertos? ¿Se irrita con facilidad? ¿Presenta rojeces?... Párate a analizar todas estas cuestiones detenidamente. No te lo tomes a la ligera, pues estas características pueden ir variando según la estación del año, tus niveles de estrés, el estado de tus hormonas, la forma en que te alimentas, tu exposición al sol o a la contaminación… Hay muchos factores que pueden alterar tu piel. ¡Tómatelo en serio!
¿Qué debes tener en cuenta a la hora de escoger tu crema hidratante?
El Dr. Leo Cerrud, experto en Medicina Estética, recomienda fijarse en la composición del cosmético. "La cosmética hidratante debe combinar dos tipos de ingredientes: los humectantes (como el ácido hialurónico o la vitamina B5) y los emolientes, que sellan y consiguen retener la hidratación y la humedad en la piel (como la glicerina, el propilenglicol, la alantoína, etc.). Es fundamental que ambos estén presentes en su formulación", explica.
¿Cuál es mejor para mí?
Otro factor importante a tener en cuenta es el tipo de textura que más te conviene. No es lo mismo tener una piel seca o deshidratada que tenerla mixta o con tendencia grasa. De ahí la importancia de hacerse un buen autodiagnóstico o pedir la opinión de un especialista. A grandes rasgos, "si tu piel es grasa, dale hidratación en formato sérum o fluido ligero. Si es seca, escoge texturas más ricas y densas", sugiere el experto.
¿Cómo y cuándo debo aplicármela?
Lo ideal es aplicar la crema sobre cara, cuello y escote dos veces al día (mañana y noche), justo después de haber limpiado bien estas zonas. Así el producto penetrará mejor y sus principios activos harán más efecto en tu cutis. "Es fundamental una buena limpieza para que la hidratación sea efectiva", recalca el doctor.
Respecto a cuándo aplicar la crema, Leo Cerrud ofrece dos alternativas:
- Si tu piel es seca, aplícate una crema hidratante de día y una nutritiva de noche.
- Si tu piel es normal/mixta, aplícate una crema hidratante de día y de noche. También puedes prescindir de ella por la noche o sustituirla por un producto con otras propiedades, como el retinol o los AHA'S (los llamados alfahidroxiácidos). De esta forma, renovarás tu piel.