¡Quémalo todo!

Modas que deberían quedarse en 2017

Esperemos que con la llegada del nuevo año algunas de las tendencias que más hemos visto por la red decidan no seguir en 2018.

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Carme del Vado

Redactora Jefe de CLARA.

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Con el nórdico a cuestas

Sí, los plumas están más de moda que nunca y nos encantan, pero vamos, a Balenciaga se le ha ido un poco la cabeza si pretende que en plena hora punta en el metro vayamos con la funda nórdica envuelta al cuello. Más que un look estiloso parece el muñeco de Michelin...

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Pantalones plastificados

Los llevó Cristina Pedroche hace un tiempo y le llovieron bastantes críticas... ¡Y entendemos por qué! La verdad es que este modelo de Topshop –que está agotado, por cierto– nos parece horroroso. El corte cropped y la cintura alta nos gustan, pero esas aberturas forradas en plástico no tienen nombre...

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¿Por qué, Kim?

Y si hablamos de plástico, estas botas que lleva Kim Kardashian nos dejaron sin palabras. El efecto invernadero que se debe crear ahí dentro debe ser la mar de gustoso, vaya... pies húmedos, botas empañadas... ¡una maravilla! Para más inri, este diseño es del marido de Kim, Kanye West. ¿Será algún tipo de venganza? Creemos que sí.

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¡No más pelo en los pies!

Ya lo avanzamos a finales de 2016, pero parece que este 2017 no hemos aprendido... Este mocasín/chancla ha triunfado más que nunca este año y no lo entendemos. Ni son bonitos ni prácticos y, además, ese pelo en la suela tiene que dar un calorcito más que agradable (léase la ironía). Por favor, a 2018 le pedimos que desaparezcan las chanclas, zapatillas, mocasines y todo lo que vaya a nuestros pies y lleve peluche.

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Ikea versión Balenciaga

Imagina pagar más de 1.500€ por una bolsa de Ikea reconvertida en bolso de lujo. Pues esto es lo que proponía Balenciaga este 2017 con The Carry Shopper Bag. Nosotras, al menos de momento, preferimos la bolsa azulona de toda la vida.

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Antes muerta que sencilla

Podríamos hacer una galería solo con horrores estilísticos de Kim Kardashian y, sin duda, este look se llevaría la palma. Esta moda que tanto hemos visto en el streetstyle de este año –chándal y tacones– debería quedarse en 2017 y no volver a salir nunca más. ¡Por favor!

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Salir en pijama a la calle

Hartas estamos ya de los looks de las influencers en los que llevan un pijamita de raso y una sandalia de tacón. Sí, son estilismos cómodos y si los defiendes bien –como hace Chiara Ferragni– son un acierto, pero ya empieza a estar un poco pasado de moda eso de salir de casa en pijama.

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Las cejas en zigzag

Prometían ser una de las tendencias de belleza más seguidas del momento, pero por suerte se han quedado en (casi) nada. Somos defensoras de una buena ceja definida, pero esta forma nos parece de lo peor. Menos mal que se ha quedado en fotos de Pinterest y algunos perfiles de Instagram, como el de Pamper.my.

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Ropa interior bien grandota

El look de la hija de Michael Jackson en esta alfombra roja demuestra que se puede vestir de Dior e ir hecha un cuadro. La ropa interior gigantesca y al aire nos parece de todo menos elegante. Por algo hemos elegido a la hija del rey del pop como una de las peor vestidas de 2017.

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Pasarse con el oversize

Llevar prendas oversize está súper de moda, pero pasarse queda tan horrible como este look de Hailey Baldwin. Quizá la modelo debería leer el artículo donde dábamos las claves para llevar la tendencia oversize sin ganar dos tallas de más porque parece que no acaba de entenderlo... Está bien que le cojas la sudadera XXL a tu novio, pero combinarla con una cazadora vaquera 3 tallas más grandes le quita sofisticación al look.

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No más purpurina

Por favor, estamos cansadas de ver fotos de famosas, influencers e it girls con la noria de Coachella de fondo y la cara llena de purpurina. Labios de colores imposibles, aplicaciones por toda la cara y glitter para parar un tren... La faena que les debe dar luego quitarse semejante estucado de la cara, pobres...

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Pelo de unicornio

Parecía que la fiebre de los unicornios empezaba a remitir, pero no, porque este 2017 se ha llevado el pelo de colores haciendo honor a este animal mitológico. Aceptamos las mascarillas de colores para alegrar nuestro cabello durante unos días, pero estos looks nos parecen demasiado. Si además lo combinas con un maquillaje bien exagerado como el de la foto anterior, ya tienes el estilismo de la perfecta festivalera.

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Convertirse en Sailor Moon

El manga mal entendido o la exageración llevada al extremo nos ha dejado looks tan "discretos" como este. El problema de llevar el cabello de este color es que bonito te dura un par de días. Luego empieza a desteñirse y a adquirir un color que nada se parece a este. Por favor, en 2018 dejemos a un lado estos looks de princesa y centrémonos.

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Los kimonos

Los llevamos en primavera. Los llevamos en verano y nos hemos empeñado en seguir llevándolos en otoño, ¿por qué? Quizá ha llegado el momento de darle puerta al kimono y optar por otro tipo de prendas más acordes a la época del año, como las cazadoras o los abrigos de colores llamativos, para dar un toque de alegría a tus estilismos. 

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Los chokers gigantes

Se nos ha ido la mano con los chokers, sin duda. Ya en 2016 los teníamos en cuenta y este año ha sido el boom de este accesorio, pero como todo, al final pecamos de modernas y acabamos pasándonos de la raya. Estos modelos de Bershka así lo demuestran... Por la cara de la modelo, creemos que estos chokers no le permiten respirar con facilidad.

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Pantalones fuseau

Este tipo de pantalón –los de la goma al final para evitar que se suban– lleva ya años intentando volver. En 2014 Stella McCartney apostó por esta prenda ochentera, pero por suerte, hasta ahora habíamos podido controlarlo. Lamentablemente, este otoño se ha colado en nuestras tiendas favoritas y parece que 2018 será su año... ¿Estás preparada? Nosotras no, y creemos que deberían quedarse quietecitos en 2017.

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Jeans rotos hasta decir basta

Ya te lo contábamos en nuestro post Amancio céntrate con los peores looks de Inditex, pero lo repetimos: si has sido atacada por un oso en el bosque lo entendemos, pero si no, olvídate de las prendas excesivamente rotas. Además, está muy bien lo de llevar una camiseta reivindicativa, pero lo que ya no acabamos de ver es llevar CUALQUIER mensaje. En 2018 esperamos que estas camisetas simplonas dejen paso de nuevo a los mensajes feministas y "guerreros".

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Se acabó ir con el culo al aire

Por suerte, parece que esta tendencia no cuajó y solo la llevó Cristina Pedroche y alguna influencer más, porque no acabamos de vernos así... Además, con el frío que hace, ¿a quién le apetece ir enseñando la retaguardia por ahí?

Foto: @cristipedroche.

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La riñonera barriga

Otra tendencia que sigue al acecho y que no acaba de encontrar su lugar son las riñoneras. No hemos podido evitar compartir esta monstruosidad –obra de The Dad Bag–, y es que esta moda puede hacer mucho daño si no la paramos a tiempo y, quién sabe, quizá en julio de 2018 te ves luciendo una bien peluda como esta...

En la redacción estamos rezándole a Dior con todas nuestras fuerzas para que las modas y tendencias rarunas que encontrarás en la galería se pierdan en 2017 y no sigan inundando perfiles de Instagram. Por amor al buen gusto y para evitar que se nos caigan los ojos al suelo con algunos looks y propuestas esperpénticas, esperamos que dejen de estar de moda.

Hola 2018, llévate todo esto por favor...

Los pantalons fuseau –sí, sí, esos con la gomita para enganchar a la planta del pie–, que nos amargaron los looks a principios de los 90 y estaban tardando en llegar ahora que vivimos su revival.

Materiales como el plástico transparente, que hemos visto en botas, gabardinas o rodilleras de vaqueros, no pueden horrorizarnos más, así que queremos decirles goodbye, tan ricamente.

TODOS, hemos dicho TODOS, los accesorios de peluche. Lo hemos sufrido en chanclas, sandalias, gorras, camisetas, sudaderas, incluso en bragas y sostenes... deberían estar prohibidos en 2018 por el bien de la supervivencia del buen gusto.

El oversize mal entendido es otra pandemia estética que nos ha invadido este año. Puede estar bien robar la sudadera a tu novio y llevarla en plan informal, siempre que él no tenga el tamaño de un pívot de la NBA y tú no pases del 1,50. Y créeme, no es buena idea combinarla con unas botas mosqueteras de súper taconazo para compensar el tamaño.

Otra idea que tampoco nos parece digna de traspasar el año es ir a elegir nuestros outfits en la semana Blancolor. Evita los abrigos que parecen nórdicos rodeando tu cuello, o pijamas y albornoces para salir a la calle. Si algo que sacas a la calle sirve también para meterte en la cama al llegar a casa, posiblemente no sea buena idea llevarlo.

Por último, nos gustaría que desaparecieran las modas festivaleras para la próxima temporada. Influencers e it girls del mundo, no más fotos de caras con más purpurina y trencitas que un pequeño pony con una noria de fondo. Yo creo que este año podríais ¡por fin! cambiar un poquito el chip...