Evitar los arañazos y otros desperfectos en el parquet y presumir de suelo perfecto es posible si sigues los consejos que encontrarás a continuación.
- Limpiarlo regularmente. Aspira el parquet una vez por semana, eso evitará que la arenilla o las partículas sólidas que se hayan ido depositando sobre él lo arañen. Luego, pasa la fregona muy escurrida con un producto especial para suelos de madera.
- Elegir productos adecuados. Evita los productos que tengan un elevado componente ácido o que contengan ceras o siliconas. A la larga, acaban dañando el parquet y le quitan brillo.
- Quitar las manchas rápidamente. Si se produce una mancha, es primordial limpiarla lo antes posible para no darle tiempo a que penetre en la madera. Si se trata de un líquido y se ha colado por las juntas, usa un secador a baja potencia para evitar que se acumule la humedad.
- Protegerlo del sol. Los potentes rayos solares lo aclaran y lo pueden estropear prematuramente. Lo más indicado es correr las cortinas o bajar las persianas siempre que no se esté en casa, para reducir su exposición al sol.
- Evitar la humedad. La humedad es uno de los peores enemigos del parquet. Le afecta tanto si hay mucha, al combar la madera, como si hay poca y el ambiente está muy seco, ya que entonces se agrieta. Lo ideal es que la humedad ambiental esté alrededor del 35-65%
Y si, aun así, se te ha arañado o manchado…
Toma nota de estos trucos para remediarlo.
- Arañazos en parquet oscuro. Si se te ha arañado, lija suavemente la zona con una lija muy fina, aplica betún de Judea, deja que penetre y, luego, limpia el parquet normalmente.
- Arañazos en parquet claro. Una solución contra los arañazos es frotarlos con medio ajo si la madera es muy clara. O con una nuez si es un poco más oscura.
- Arañazos profundos. Pasa un papel de lija fino con suavidad y rellena el arañazo con cera para maderas. Si es muy profundo, usa cera dura. Y luego, aplica betún de Judea, ajo o nuez dependiendo de su tonalidad.
- Manchas de rotulador. Pasa un papel secante y, a continuación, limpia con una solución de zumo de medio limón. Y límpialo normalmente.
- Marcas de vasos. Prueba a poner sobre ellas una mezcla de mayonesa y bicarbonato. Aplica calor con un secador, pero sin acercarlo demasiado, y limpia.