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Trenza cascada
¿Quieres llevar el pelo suelto? Prueba esta trenza cascada. Queda súper elegante y te dará un toque diferente. Hacerla no es demasiado complicado, pero requiere de un poquito de práctica. Es como hacer una trenza de raíz, pero en lugar de seguir incorporando los nuevos mechones, se van soltando por debajo una vez que ya los has usado.
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Coleta bubble
La coleta bubble es uno de los peinados más de mod,a pero si quieres darle un toque diferente empieza recogiendo los mechones frontales en dos trenzas y luego haz tu coleta bubble normalmente.
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Media corona
Llevar un semirecogido como este es garantía de éxito. Solo tienes que hacerte dos trenzas con los mechones frontales y solaparlas por detrás de la cabeza. Ondula las puntas con las tenacillas para darle más movimiento a la melena.
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Diadema
Un peinado tan sutil y discreto como este dejará que tu melena suelta brille en todo su esplendor. Solo tienes que coger un mechón de pelo de la parte de detrás de una de tus orejas, trenzarlo como más te guste, y asegurarlo con una horquilla por detrás de la otra oreja.
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Despeinado
No existe una sola fórmula para crear un peinado como este, porque todo su encanto reside en este aspecto messy (despeinado) tan cool y que tanto se lleva este Otoño/Invierno 2018-2019. La clave está en hacer trenzas diferentes, de espiga, de raíz, tradicionales e ir entrelazándolas en la parte trasera de la cabeza. Para adornarlo, se puede añadir una cadenita.
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Doble moño
Este peinado se puede hacer fácilmente en casa. Se hace igual que las boxer braids, ya sabes, con dos trenzas alemanas de raíz. Luego se abren los cabos y se recogen las trenzas en dos moños bajos.
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Ladeado
Nos gusta esta trenza corona por su gran originalidad. Hay que hacer una trenza de espiga muy suelta a cada lado de la cabeza y unirlas en uno de los laterales dejando que todo el cabello restante caiga suelto por encima del hombro. Te ayudará tener el pelo previamente ondulado.
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Corona doble
Ya hemos dicho cuanto nos gustan las trenzas corona y esta además viene por partida doble. Si eres muy hábil con las trenzas no te resultará demasiado complicado, aunque se necesita una melena bastante larga. Solo tienes que recoger primero la zona media por detrás dejando el flequillo libre. Divide toda la melena en dos y haz dos trenzas holandesas en cada lado hasta terminar en las puntas. Después, solo tienes que cruzar las dos trenzas por encima de la cabeza.
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Moño alto
Los moños altos siempre quedan glamurosos y más cuando tienen tanto volumen como este. Empieza recogiendo el pelo en una coleta, separa un mechón y trenza el resto. Abre bien los cabos para que tenga el mayor volumen posible y enróllalo sobre sí mismo. Asegura con horquillas. Ahora trenza el mechón que habías dejado libre y cócalo alrededor del moño.
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Espiga triple
Nos vuelven locas las trenzas de espiga como esta. Si tienes el pelo muy largo puedes dividir tu melena y hacerte tres trenzas de espiga para luego hacer una normal con ellas.
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Corona holandesa
Otra trenza corona que nos ha conquistado es esta. Se trata de una trenza que comienza de raíz en un lateral y se termina como si fuera a quedar sobre un hombro, solo que, en lugar de eso, se coloca por encima de la cabeza a modo de corona. En bodas y eventos especiales, puedes colocarte una ramita de olivo o algunas flores frescas a modo de adorno.
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Princesa de cuento
Llevar el cabello trenzado al más puro estilo de las princesas de cuento no tiene demasiado misterio. Pero si quieres darle un toque más especial a tu peinado, empieza enrollando los mechones laterales hasta recoger toda la melena en una coleta baja. Abre el hueco que queda por encima de la goma, mete la coleta y después trénzala. Abre un poco los cabos para darle más volumen y, si quieres, coloca una diadema o tocado.
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Moño bajo con trenza
Este peinado es uno de los más fáciles y socorridos, porque sirve para cualquier ocasión (bodas incluidas, claro). Solo hay que hacer una trenza de raíz en uno de los laterales de la cabeza y convertirla en un moñito bajo.
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La versión de espiga
Otra opción es la de coger un mechón y trenzarlo en forma de espiga (en lugar de recurrir a la trenza de raíz). Haz el moño bajo y después rodéalo con tu trenza de espiga. Suelta unos mechones para darle un toque más casual.
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Bubble braid
La coleta bubble está muy moda, como ya hemos visto, pero nosotras te proponemos una versión en trenza de espiga. Solo hay que ir trenzando las secciones con esta técnica. Puedes hacerla directamente o como aquí, con un loop para dar más volumen a los laterales.
¿Boda a la vista este Otoño/Invierno 2018-2019? Tranquila porque tenemos los mejores peinados con trenzas para que seas la invitada mejor peinada de la fiesta. Tenemos opciones para que puedas hacerte tú en casa y otras más complicadas por si prefieres ir a la pelu. Todas ellas tienen a las trenzas como auténticas protagonistas ¡y es que quedan tan bonitas!
Peinados con trenzas para triunfar en las bodas
- Moños. ¿Quieres llevar un peinado con trenzas y un moño? Puedes probar con un moño alto muy glamuroso. Se empieza trenzando una coleta y luego se convierte en moño. Si pones una trenza más fina alrededor conseguirás darle un toque diferente. En el caso de que prefieras los moños bajos, puedes probar con trenzas de raíz en el flequillo o a hacer una suelta y colocarla por encima. Otra opción es empezar por un par de boxer braids y convertirlas en dos moños bajos.
- Coronas. Nos encantan las trenzas corona porque sientan bien a todo el mundo y van bien con todo tipo de vestido o mono. La más sencilla, consiste en hacerse dos trenzas y cruzarlas en la parte alta de la cabeza. Si quieres complicarte un poco más, puedes empezar con trenzas de raíz y luego colocarlas a modo de corona una vez que ya estén terminadas. También puedes combinar todo tipo de trenzas y convertirlas en un recogido messy o ligeramente despeinado.
- Semirecogidos. Son unos de nuestros favoritos porque puedes dejarte el resto del pelo suelto y presumir de melena. Nos gustan las medias coronas, como no podía ser de otra manera, y también las trenzas cascada, porque son muy originales. Una opción más sencilla, pero igual de sofisticada, es la de hacerse una diadema con una trencita que nazca por detrás de una oreja y vaya hasta detrás de la otra por encima de la cabeza. Se complementa con unas ondas ¡y lista!